Page 129 - LIBRO DE ACTAS-II-JORINVEDUC-2016
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docentes, para responder a las consignas de un ejercicio. En estos casos se ve que los estudiantes
leen con cierta ansiedad, tratando de identificar con rapidez qué deben hacer y cómo hacerlo
correctamente. En muchos casos es para poder continuar haciendo otras actividades o, en el caso
que corresponda, poder salir al recreo.
Otro de los usos de la lectura es cuando tienen un texto sobre el que deben resolver algún
cuestionario (guías escritas o a los cuestionarios verbales). En ese caso, las valoraciones construidas
en el grupo, sobre las capacidades de cada uno de ellos pesan notablemente en el momento de elegir
quién lo hará. Aparece así el/la que sabe, que colabora frente al que habla despacito, evidenciando
las valoraciones que construyen los estudiantes en torno a la importancia de la lectura y sus propias
posibilidades de participación en la tarea asignada. En esas oportunidades no todos se sienten en
condiciones de leer frente al grupo y, aún quien lo suele hacer, lo hace tomando en consideración
las valoraciones del docente para fundamentar su posición en el grupo.
El otro uso de la lectura es cuando el/la docente es quien lee y los estudiantes escuchan. En
estos casos el tipo de lectura es más recreativa que informativa. Es notable en estos momentos cómo
los estudiantes se disponen a escuchar.
Los estudiantes logran mantenerse focalizados en la lectura con atención durante algún
tiempo, lo cual se relaciona directamente con la forma en que se exprese el/la docente. Asimismo,
es notable la capacidad de permanecer atentos, dejando de lado las permanentes interrupciones
que suceden en el aula. Los chicos atienden. A pesar de todas las intervenciones de todo tipo y de
todas las dificultades, atienden. Es como si tuvieran que hacer un gran esfuerzo en seguir las
actividades, interpretarlas, entenderlas. No obstante, llegado el momento, algunos estudiantes
suelen estar como ausentes, sentados en su lugar, distraídos, haciendo otras actividades,
conversando con algún compañero.
Los de primer año siguen la resolución, las chicas opinan entre ellas si es así o no, los de segundo
año están en otro mundo, salvo tres alumnos que prestan atención. (Observación Anexo Rural,
Nro. 6, 12:18)
Pudimos observar cierta distancia en el trato de los estudiantes con los profesores
especialistas, a diferencia del trato que tienen con la docente tutora (Hidalgo y otros, 2013). En este
marco, la estrategia de enseñanza más común se caracteriza, en ambas escuelas, por una secuencia
de indicaciones de la/el docente, a partir de una consigna, sin mediar conversación ni acuerdos
respecto a otras formas de hacer lo mismo. El/la docente se desplaza luego por los lugares donde
están los estudiantes (banco por banco) en una práctica de atención personalizada, que los
estudiantes no reconocen como tal.
La profe va trabajando con segundo año explicando banco por banco, explica las dudas que le
van diciendo lxschicxs de tercer año, retomando contenidos previos... La profe se va con 3ro a
explicar la consigna, retoma temas anteriores, hace preguntas y las respuestas son reutilizadas,
hay 3 chicos que no emiten sonido. El otro agrupamiento de 1ro y 2do van tratando de responder
la consigna, 2 chicos de 2do trabajan frente al pizarrón, buscan en la carpeta. Las chicas se
ayudan entre ellas y los chicos de 1ro no saben que hacer, hay dos que se sopapean y los otros 2
miran el tiempo pasar. El grupo de 2do de 5 van respondiendo y se van pasando las hojas con las
respuestas. Vuelve la profe a pasar banco x banco a ver que respondieron. (Observación, Anexo
Rural Nro. 7, 13:3)
El silencio en algunos momentos es también una de las características tanto en el momento
de la lectura y, excepcionalmente, de otras interacciones áulicas. Nos preguntamos si es una
estrategia que actualizan los estudiantes para aprender o para permanecer en la clase, en la
situación escolarizada, especialmente en el caso de los estudiantes que conforman grupos satélites
o los que trabajan solos.
Los dos chicos de tercer año que están aparte siguen sin emitir sonido, solamente entre ellos se
piden datos y están atentos a lo que los otros dicen. (Observación, Anexo Rural Nro. 7, 13:14)
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