Page 91 - Viaje A Un Planeta Wu-Wei - Gabriel Bermudez Castillo
P. 91
Viaje a un plan eta Wu -Wei Gabri e l Berm údez Casti llo
—Hablar mucho —contestó Manchuok—. No
entender nada. ¿Tú entender, Vikole?
El hombre alto no contestó. Sus ojos, azules y fríos,
estaban clavados silenciosamente en Sergio, como si le
estudiase profundamente. Al cabo de unos segundos
hizo un ligero gesto negativo con la cabeza.
—Digo —repitió Sergio, ya impaciente— que si me
acompañáis y me guiáis por la selva, o lo que sea,
cazaré para vosotros y os haré regalos. ¿Entendido?
—Ir... ¿dónde?
—A las columnas negras... una detrás de otra... El
hombre alto se puso en pie, silenciosamente, y sus
compañeros le imitaron.
—No ir, no ir —dijo Manchuok—. Mucho malo allí...
No ir.
—¿Os marcháis?
—Irnos ahora... Pero antes dar regalos. Visitantes
estrellas dar regalos siempre. Criminales no; sólo
estacazos.
—Está bien.
Sin volverse, Sergio extrajo tres pequeños frascos de
desinfectante de su mochila. Iba a arrojárselos, cuando
el hombre alto se movió silenciosamente hacia él...
Sergio comenzó a levantar el fusil, pero el otro abrió las
91

