Page 90 - Los Humanoides - Jack Willianson
P. 90
Capitulo IX
El humanoide que actuaba como guía explicó a
Claypool una vez que hubieron salido del recinto, que
Ruth se hallaba bajo el efecto de una droga sintética
llamada euforidina que producía una sensación de
absoluta felicidad, desterrando los temores y las
inhibiciones.
—¡Pera le han hecho perder la memoria! —protestó
vehementemente el astrónomo—. ¡Yo quiero que se la
devuelvan!
—No es necesario. Nosotros la protegemos y la
ayudamos a ser dichosa, doctor. Tal vez usted también
necesite una inyección de la droga...
Un escalofrío recorrió la columna vertebral de
Claypool. Tembloroso murmuró:
—No... no lo creo —aquellos negros dedos
aterradores se adentraron cada vez más en su
cerebro—. Estoy seguro que no necesitaré la droga para
ser feliz...
—Eso lo resolveremos nosotros, doctor. Pero
trataremos de no utilizarla.
Los humanoides tenían que ser detenidos.
Claypool comprendió que debía buscar la
oportunidad de oprimir el botón que lanzaría a los tres
90

