Page 237 - El hombre ilustrado - Ray Bradbury
P. 237
algún sitio cuando yo no estoy allí. Me gustaría
saberlo de veras.
—Eso no es posible.
—¿Sabes? —dijo Hitchcock—, tuve la idea de salir
al espacio hace ya cinco años. Cuando perdí mi
empleo. ¿No sabías que quise ser escritor? Oh, sí,
uno de esos hombres que hablan siempre de
escribir, pero que casi nunca escriben. Y con un
temperamento excesivo. Perdí mi empleo. Dejé el
negocio de los libros y no pude conseguir otro
trabajo, y comencé a rodar. Luego murió mi mujer.
Ya ves, nada se queda en su sitio, no se puede
confiar en las cosas. Tuve que dejar a mi hijo al
cuidado de una tía. Y las cosas empeoraron todavía
más. Al fin un día me publicaron un cuento, con mi
nombre debajo, pero no era yo.
—No entiendo.
El rostro de Hitchcock había perdido el color.
Sudaba.
—Sólo sé que yo miraba la página, y mi nombre
bajo el titulo. Por Joseph Hitchcock. Pero se trataba
de otra persona. No podía saber en ese momento y
de veras si esa persona era yo. El cuento me era
familiar… Sabía que yo lo había escrito, pero ese
nombre sobre el papel no era yo. Era un símbolo,
un nombre. Algo extraño. Y entonces comprendí
que aunque triunfase como escritor, mi triunfo no
tendría sentido. Yo no era ese nombre. Mi nombre
236

