Page 356 - Vienen cuando hace frio - Carlos Sisi
P. 356
entregaba su cuerpo a un hombre joven. El corazón
se enervó con una tetanización cardíaca irreversible
y se bloqueó, en una especie de irónico paroxismo
de justicia.
Cassie murió mientras miraba con hipnótica
fascinación la sombra en el umbral.
Joe se concentró otra vez en Wright.
¿Cómo, en el nombre de Dios, cómo lo hacía?
¿Cómo había podido encontrarlo tan deprisa? Él y
Allen no habían coincidido en el mismo sitio, de eso
estaba razonablemente seguro, y habían estado tan
cerca cuando ocurrió el desfase dimensional… No
solo no lo había visto por ninguna parte, Allen
había saltado huyendo de algo que solo él veía, y en
aquella apacible bahía portuaria no había nada que
provocase el más mínimo atisbo de inquietud. No,
Allen había ido a parar a algún otro sitio.
Entonces, ¿cómo, cómo conseguía controlar los
saltos?
—Joe… —exclamó David—. Esquivo Joe… Dos
veces has escapado de mis manos… ¿Crees que…?
Joe no le dio tiempo a continuar. Movió los brazos
para coger la pistola de clavos y la apuntó hacia él.
Wright abrió mucho los ojos, pero pudo reaccionar
a tiempo. Para cuando Joe apretó el gatillo, David
355

