Page 403 - Vienen cuando hace frio - Carlos Sisi
P. 403
parece llamar su atención, pero intuye que un grito
hará sonar todas sus alarmas, así que se contiene.
«Pero Allen… Allen morirá», se dice.
Por fin, de una manera casi instintiva, hace lo único
que se le ocurre: apunta con cuidado y dispara un
único clavo.
La pistola emite su característico sonido hidráulico
y el clavo vuela sobre los restos de los huevos,
yendo a parar a una de las bolsas que están más
alejadas de Allen. Se hunde en su carcasa y
desaparece limpiamente. Hay un interminable
segundo de espera y, mientras transcurre, Joe
piensa que el clavo no ha sido suficiente para rasgar
la cobertura. Aun peor: es posible que el clavo haya
matado a la hermosa luz de su interior, igual que
mata a las formas negras. Cuando está ya
convenciéndose de que eso tiene sentido y de que
acaba de hacer algo horrible, la parte superior de la
bolsa revienta con una explosión de líquido
transparente y el resto se desinfla poco a poco, sin
sonido. Su prisionero escapa.
El archidemonio se mueve y, cuando lo hace, parece
que emite algún tipo de ondas que distorsionan la
imagen a su paso, como si emanara un calor
espantoso. Se desplaza, ganando velocidad, y
cuando está a cierta distancia del huevo lanza sus
402

