Page 337 - Triton - Samuel R. Delany
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¿Era piedad hacia él?
Odió aquel sentimiento.
¿Estaba examinándose a sí misma?
Pero, ¿qué tenía que examinar?
¿Estaba pensando en qué decir a continuación?
¿Por qué simplemente no decía «sí»?
—Está bien —dijo ella—. Sí. Iré contigo esta noche.
Después de nuestra última actuación.
Él casi dejó caer su mano. ¿Por qué ella no había dicho
simplemente...?
—¿Te parece bien? —preguntó ella, con aquella ligera
sonrisa familiar.
Él asintió, preguntándose bruscamente: ¿Adonde
podían ir? ¿Al albergue de él? ¿A la casa de ella? No...,
tenía que llevarla a alguna parte. Primero. Y estaban a un
centenar de millones de kilómetros de cualquier lugar
que él conociera.
—Reúnete conmigo aquí —dijo ella—. A las nueve.
¿Está bien? Eso es sólo media hora después de la puesta
del sol, si recuerdo correctamente.
—Sí —dijo él.
—E iremos a alguna parte.
Él asintió.
—Bien. —Ella retiró su mano, le miró de nuevo,
dudó—. ¿Hasta las nueve entonces? —Abrió la puerta—
. Nos encontraremos aquí.
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