Page 372 - Triton - Samuel R. Delany
P. 372
Tanto las incomodidades como los placeres le
aseguraban que aquél era su territorio. El sudor se secó.
Tomó el frío vaso, bebió. Y se dio cuenta de que, durante
el desarrollo de sus pensamientos, la Púa había
permanecido en silencio.
—¿Ocurre algo?
Ella alzó las cejas, luego alzó la barbilla de sobre sus
entrelazados dedos.
—No...
Sonriente, él dijo:
—¿Estás segura? ¿Absolutamente? ¿No hay nada en
mi actitud, en mi comportamiento, en mis ropas, que
desapruebes?
—No seas tonto. Tú sabes comportarte en lugares
como éste..., lo cual lo hace dos veces más divertido.
Evidentemente te has tomado mucho tiempo con tus
ropas..., lo cual aprecio mucho: Es por eso por lo que no
vine con Windy y Charo. Ellos insistieron en ir con sus
ropas cotidianas, inmediatamente después del trabajo.
—Bueno, el interés de un lugar como éste es que
puedes acudir a él vestido tan formal o tan
informalmente como desees.
—Pero, si quieres jugar al anacronismo, debes hacerlo
hasta el final. Realmente —sonrió—, si yo perteneciera al
tipo que se irrita por las ropas que lleva alguien, Windy
me hubiera curado hace mucho tiempo. —Ahora frunció
371

