Page 830 - Hijos del dios binario - David B Gil
P. 830
—Solo necesito hablar con una persona.
Clarice lo miró de reojo. Su templanza aún la
desconcertaba, incluso llegaba a inquietarla. Pero,
al mismo tiempo, detectaba en él una generosidad
de espíritu impropia de un adulto.
—¿Qué nos sucederá ahora? —quiso saber
Nicholas.
—Si no lo evitamos, pasaréis al sistema de
protección de menores del Reino Unido. No será
agradable. Sois demasiado mayores como para
encontraros familias de acogida, así que os
distribuirán por instituciones e internados de todo
el país.
—¿Colegios como St. Martha?
Ella bebió antes de contestar, tomándose un
momento para templar unas palabras tan amargas
como aquel café.
—No. No sé cómo sería la vida ahí dentro, pero
debéis evitar el programa de internamiento a toda
costa.
Nicholas levantó la mirada del suelo y observó
con detenimiento la expresión de Clarice. Su
comentario le había resultado particularmente
honesto.
—¿Has estado en uno de esos programas?
—Hasta los doce años —corroboró ella,
830

