Page 474 - LIBRO DE ACTAS-II-JORINVEDUC-2016
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Vale decir que la Ley de Educación Nacional Nº 26.206 (2006) establece en el artículo 30 que
               “la Educación Secundaria en todas sus modalidades y orientaciones tiene la finalidad de habilitar a
               los/las adolescentes y jóvenes para el ejercicio pleno de la ciudadanía, para el trabajo y para la
               continuación  de  estudios,  son  sus  objetivos,  entre  otros:  “c)  Desarrollar  y  consolidar  en  cada
               estudiante las capacidades de estudio, aprendizaje e investigación, de trabajo individual y en equipo,
               de  esfuerzo,  iniciativa  y  responsabilidad,  como  condiciones  necesarias  para  el  acceso  al  mundo
               laboral, los estudios superiores y la educación a lo largo de toda la vida.”


               ¿Desertores del futuro?
                      Desde una estrategia del desencanto o de una epistemología de la esperanza Reguillo (2000,
               2012) y Saintout (2009, 2013) proponen respectivamente una línea positiva (inversa a la anterior
               más  bien  “negativa”)  y  en  otros  términos  desde  una  perspectiva  sociocultural.  En  palabras  de
               Reguillo (2012: 26-28) “enfatizar el error que puede representar pensar a este grupo social como un
               continuo temporal y ahistórico. Por el contrario, para entender las culturas juveniles, es fundamental
               partir del reconocimiento de su carácter dinámico y discontinuo.”


               Incidencia y Buenas prácticas
                      Por su parte, desde la perspectiva de la comunicación para la incidencia 238  Cicalese (2013)
               propone pensar las “buenas prácticas” que realizan los jóvenes -en relación al trabajo- y que aquí se
               pueden pensar en relación al estudio; entendiendo por buenas prácticas: “una intervención eficaz
               realizada por miembros de una organización que supone una mejora y que debe estar documentada
               a fin de poder repetirse por la misma u otra organización en un ámbito parecido.” (Cicalese, 2013: p.
               40-41).


               Abordaje metodológico y diseño de la investigación
                      En cuanto a la metodología la investigación se distancia del enfoque etnográfico y en la línea
               de investigaciones sobre “Juventudes”, por  ejemplo, de Mercado (1996),  Servetto (1996), Uanini
               (2003) aunque se retomarán aportes generales de la antropología, ya que además fue factible a la
               investigadora acceder a todas las escuelas secundarias de la región de estudio.


               Relevamiento de datos
                      Dado que la edad mínima estipulada según la normativa vigente 239  en que un adolescente
               culmina la escuela secundaria es 17 años y que la edad máxima si se quiere ya no se puede afirmar
               cuál sea, en este estudio se contempla de modo abierto la franja hasta los 24 años (subgrupo 20-24
               años) ya que a partir de esa edad es en la que son considerados adultos jóvenes y pasan a terminar el
               nivel medio en programas de terminalidad de estudios secundarios (como el FinEs) en la “Modalidad
               de Jóvenes y Adultos”.
                      La  investigación  se  orienta  tanto  al  orden  simbólico  (cultura  y  subculturas)  juveniles  –
               adolescentes en este caso- y por ende hacia los actores, los estudiantes (como posibles aspirantes a la
               educación superior hoy en el siglo XXI presencial y virtual). Como categoría analítica los adolescentes
               y jóvenes comparten la característica de estar en el último año de la escuela secundaria (6º año en las
               orientadas y 7º año en las de modalidad técnica).




               238  La “comunicación para la incidencia” es un concepto relativamente nuevo de prácticas no necesariamente   474
               nuevas como expresa su autora Cicalese (2013: p. 11 y 16) “en términos técnicos es un proceso, no un efecto.
               Es una intencionalidad, no una consecuencia o un logro. Es un ideario o un horizonte de expectativas desde el
               cual se dialoga, no el saldo final de una negociación.”
               239  Plan Quinquenal Nacional de Educación Obligatoria y Formación Docente Resolución CFE N.º 188/12, 5 de
               diciembre de 2012.
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