Page 77 - Un Mundo Fuera Del Tiempo - Larry Niven
P. 77
Larry Niven Un mundo fuera del tiempo
cuando le congelaron, en 1970; aunque también
esperaba no despertar jamás.
—Pirssa —susurró.
—Aquí estoy. ¿Dónde iba a estar?
—Sí. ¿Cuál es nuestra situación?
—A ciento seis años‐luz del Sol. Debes comer.
Corbell se sintió súbitamente hambriento. Se
incorporó, descansó un poco y bajó de la
cámara, tratándose a sí mismo como si su
cuerpo fuera de frágil cristal. Estaba flaco como
un esqueleto, y muy débil.
—Prepárame una comida rápida para que me
la lleve al útero —dijo.
—Está ya lista.
Sentía la cabeza vacía…; no, se sentía vacío
por entero, liviano. Tomó un gran bulbo de
sopa caliente de la cocina y caminó hasta el
útero, sorbiendo el bulbo por el trayecto.
—Preséntame el panorama —ordenó.
Las paredes desaparecieron. Las estrellas
centelleaban en un tono blanco violáceo por
encima de él. Todo el arco iris estelar se
extendía ante sus ojos: hacia el centro, estrellas
violáceas; más allá, anillos de azul, verde,
amarillo, anaranjado y rojo opaco. Hacia los
lados y por debajo no había casi nada: diez o
doce puntos rojos, desvaídos, y el plumoso
76

