Page 293 - El hombre ilustrado - Ray Bradbury
P. 293

Saul estaba echado sobre Johnson. Abandonaron la


           lucha.



           El silencio era terrible. Los hombres vieron cómo


           Nueva  York  se  hundía  en  el  mar.  Las  grandes

           armazones  se  doblaron,  se  retorcieron,  se


           derrumbaron,  con  un  silbido,  un  gorgoteo,  y  un


           débil lamento, con un ruido de metal arruinado y


           de vejez.



           Mark  estaba  de  pie  entre  los  edificios.  Y  luego,

           silenciosamente, como otro edificio, con un agujero


           preciso y rojo en medio del pecho, se derrumbó.



           Saul miró fijamente a los hombres y el cadáver. Se


           incorporó con el revólver en la mano.


           Johnson no se movió… Tenía miedo de moverse.



           Todos  cerraron  los  ojos  y  volvieron  a  abrirlos,


           pensando,  quizá,  que  con  ese  acto  reanimarían  a


           Mark.



           El frío llenaba la caverna.



           Saul miró distraídamente el arma que tenía en la

           mano. Dio un paso atrás y la arrojó hacia el valle,


           sin mirar cómo caía.



           Los hombres bajaron los ojos y miraron incrédulos


           el cadáver. Saul se agachó y tomó entre sus manos

           una mano inerte.



           —Leonard  —dijo  con  suavidad—.  Leonard.—


           Sacudió la mano—. Leonard.








                                                                                                          292
   288   289   290   291   292   293   294   295   296   297   298