Page 119 - La Penúltima Verdad - Philip K. Dick
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La penúltima verdad                           Philip K. Dick   119


              ‐Muy  bien ‐dijo  él,  completamente  alarmado.  Tras  él

           hacían  cola  con  impaciencia  otros  colegas  suyos  de


           Yance‐: Dígame lo que es.

              La mónada dirigente repuso:

              ‐Con  el  mayor  respeto,  le  remito  a  la  fuente  de


           información número uno. Los dos Documentales de 1982,

           en ambas versiones, A y B; no tome esto como una crítica,

           pero haga el favor de dirigirse al mostrador que tiene a su


           derecha, y allí recibirá las bobinas con la obra original de

           Gottlieb Fischer.

              El  fondo,  el  sostén,  y  la  estructura,  la  configuración


           misma del mundo de Joseph Adams, se desmoronaron

           con  estrépito  en  su  interior.  Y  mientras  se  dirigía  al


           mostrador de su derecha en busca de las bobinas, murió

           íntimamente, y en medio de grandes dolores, al sentirse

           falto del ritmo metabólico fundamental de su existencia.


              Porque si resultaba que aún no había entendido los dos

           Documentales  hechos  en  1982  por  Gottlieb  Fischer,


           entonces no había entendido nada.

              Era preciso tener en cuenta que todo el entramado de

           Yancy, lo que el simulacro era y cómo había sido creado...


           lo  que  justificaba  la  existencia  de  todos  ellos,  aquella

           colmena de hombres de Yance entre quienes figuraba él

           mismo, Verne Lindblom, Lantano e incluso el horrible y


           poderoso  viejo  Brose...  todo  aquello  descansaba  y  se

           basaba en los Documentales A y B. El primero se hizo







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