Page 218 - La Nave - Tomas Salvador
P. 218
gracias; no quiero comer más. Dame más bebida y
quédate a mi lado.
Ylus, disgustado al parecer, pero resignado,
mandó traer una luz de taza. Se la puso delante, y
se concentró cerrando los ojos. Admiró al anciano,
mientras Sad, a su lado, apenas osaba respirar.
—Me pides que hable, Shim, y apenas sé lo que
tengo que decir. Pero el símbolo de nuestra familia
me ha hablado y me dice que puedo confiar en ti.
Me ha dicho cosas tristes, que te afectan, pero que
no voy a decirte. Tengo miedo, por las cosas que he
visto. Sin embargo, la luz me dice que puedo
confiar. Nuestra familia, la familia de los símbolos,
no debe tener miedo. Hasta ahora hemos vivido y
amado en este nivel de la Nave. Mi padre me dejó
la familia, y yo habré de dejarla a aquel de mis hijos
que mejor comprenda los símbolos. No quiero
ningún cambio que no sea razonable. No lo quiero,
Shim, y espero que lo comprendas.
Estaba emocionado escuchando a Ylus. Nunca
hubiera supuesto que unas sencillas palabras le
afectaran tanto y con tanta fuerza. Era un lazo más
de unión con el pueblo wit. Las palabras habladas
también tenían emoción y verdad. No eran simples
monosílabos para conceder o negar, para pedir y
entregar. Eran palabras producto del cuerpo
humano, parte de la piel, de los ojos, del corazón y
218

