Page 78 - La Nave - Tomas Salvador
P. 78
signos me han ayudado. Diríase que fueron
grabados por hombres de otro idioma. La turbación
no me deja meditar y estoy consignando
mecánicamente.
No comprendo nada. Había esperado, quizás
ingenuamente, que si preguntaba al Libro, éste me
explicaría por sí mismo, como hace el repositor de
ozono. Y el Libro no ha explicado nada. Ha hablado
y yo no he entendido. ¿Ha cambiado el idioma de la
Nave? ¡Imposible! ¡Nada puede cambiar ni cambia
en la Nave! La Nave no ha cambiado ni puede
cambiar. Su principio es indestructible. ¡Si admito la
posibilidad de un cambio, habría de admitir la
catástrofe que dicho cambio acarrearía!
Pero el hecho es que yo, Shim, Hombre de Letras
educado para ello, no he comprendido lo que el
Libro me ha transmitido obedeciendo mi pregunta.
¿Le estará prohibido hacerlo? Y siendo así, ¿habrá
tomado en cuenta mi quebrantamiento de las
normas para ser castigado? Tengo miedo. ¡No; no es
cierto! No tengo miedo a Mei‐Lum‐Faro. Lo tengo a
la negación absoluta. Si el Libro no me entrega su
secreto, estaré en peor situación que Saú, el que, por
los menos, entiende su repositor.
He vuelto el primer volumen a su estante. Cuando
lo hacía, he recordado unos números que pueden
ser una fecha, que tienen que ser una fecha, aunque no
78

