Page 968 - Anatema - Neal Stephenson
P. 968
—InterLOCuTOR —dijo fra Lodoghir, manifestando una
impaciencia que intentó ocultar con una risita—. ¡En
Edhar sois mucho más formales con las palabras! ¡Bravo
por resistir de esa forma! Dime, ¿todavía decís «sapiente»
o habéis adoptado el término «sante» como todos los
demás?
—Decimos «sante» —respondí. Fra Lodoghir hablaba
tanto que me parecía que yo no tenía que decir mucho.
—Espléndido. Bien, la idea es que el Convox ha estado
haciendo cálculos, analizando muestras y examinando los
motus de la Visitación de Orithena; pero hay cierto interés,
comprensible, en oír a un testigo… razón por la que estás
aquí. En lugar de hacerte pasar por el esfuerzo de preparar
una conferencia, emplearemos el formato de un diálogo
extemporáneo. Tengo varias preguntas que me han
pasado distintos grupos interesados. —Me mostró varias
hojas—. Además hay algunos temas que me interesan a mí
y que me gustaría tratar si tenemos tiempo.
Durante este diálogo, o más bien monólogo, el Plenario
tomó forma. La sur del auricular nos condujo por unos
escalones que había colocado y fra Lodoghir me siguió a
la plataforma. Nos fijaron micrófonos a los paños.
Colocaron dos vasos y una jarra de agua en una mesita.
Aparte de eso, no había muebles. Por alguna razón, no
estaba en absoluto nervioso y no pensaba en lo que diría.
Pensaba en la curiosa estructura sobre la que nos
encontrábamos mi loctor y yo: un fragmento de plano
968

