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la que se centró también nuestro trabajo, es la investigación-acción en el aula; así como también nos
asentamos sobre las bases del modelo didáctico ecológico. Este modelo concibe el aula en términos
de intercambios socioculturales, considerándola como un espacio social de intercambio,
interrelación y negociación dentro de un contexto institucional que genera condiciones (Gimeno
Sacristán y Pérez Gómez, 1997). También asume una reciproca influencia en las relaciones de clase
entre profesores y alumnos, considerando a los individuos como procesadores activos de la
información y centrándose en la creación e intercambio de los significados que subyacen a los
comportamientos.
De esta forma, siguiendo los aportes de Tifunoff y Doyle (en Gimeno Sacristán y Pérez Gómez,
1997), en el presente trabajo, considerar el modelo ecológico implicó considerar el contexto físico y
psicosocial donde tienen lugar los intercambios; teniendo en cuenta también la configuración de los
espacios, las actividades programadas, los roles que desempeñan los individuos y la organización y
distribución de los tiempos, ya que todo ello condiciona la convivencia en el aula. Es por todo ello que
el diseño de las Planificaciones didácticas cobra especial interés en este modelo.
Desde una visión crítica de la educación, y considerando también las premisas del modelo
ecológico “El curriculum se ha de configurar dentro de la práctica pedagógica, cuando el profesor
selecciona y organiza los ‘contenidos de conocimiento’ como respuesta a la búsqueda de significado de
los alumnos” (Elliot, 1993). Este modelo educativo concuerda con lo propuesto como ideal dentro de
las cátedras de estadística, donde se señala que la enseñanza de la estadística lleva implícito un
modelo de enseñanza y aprendizaje que Ontoria (1992, en Estrada Roca, 2002) resume diciendo que
el alumno debe “aprender a aprender; mientras que el profesor debe “enseñar a pensar”. Desde esta
perspectiva, los contenidos no son tan importantes, pero si el acceso al conocimiento. Tanto el
profesor como el alumno tienen que estar constantemente construyendo y reconstruyendo el
conocimiento a través, principalmente, de la experiencia (Stenhouse, 1993).
Para conseguir este acceso al conocimiento y a la actitud crítica, la planificación didáctica
tiene que tener en cuenta el desarrollo de un entorno psicosocial capaz de favorecer las relaciones
interpersonales, permitiendo grupos de interacción en donde reine una atmósfera cálida, permisiva,
amistosa y democrática, que motive a los individuos y los haga sentirse satisfechos. Para Ander Egg
(1993) es fundamental que en una planificación se fomente, aliente y cree formas de acción, para que
el alumno se comprometa en la transformación de la sociedad, aunque sea en lo pequeño que está a
su alcance.
Por lo tanto, desde esta perspectiva, la enseñanza ya no se considerará como una actividad
orientada a controlar o a causar el aprendizaje; sino que tiene que tender a hacer comprensibles los
conocimientos en base a las realidades propias de los individuos; estará más centrada en el proceso
que en el producto; más dirigida a activar, comprometer, desafiar y extender las capacidades de la
mente humana, (Elliot, 1993; Stenhouse, 1993).
Por todo ello el aprendizaje es visto como una producción activa de significados, no como una
reproducción pasiva del mismo (Elliot, 1993). Doyle (en Gimeno Sacristán y Pérez Gómez, 1997),
considera que para hablar de aprendizaje es necesario entender e interpretar los intercambios
significativos que se dan en el aula, ya que el alumno aprende como consecuencia de su participación
en la vida social del aula y por la realización individual o compartida de tareas académicas.
Todo esto nos lleva a considerar que el éxito o no de ese proceso de enseñanza y de
aprendizaje dependerá de múltiples factores, reflejados todos ellos en la interacción que se produce
en el aula. Es por ello que por el presente trabajo se pretendió fundamentar y consensuar
modificaciones a la Programación y Planificación de cátedra ya existentes, basándonos en las voces
de los exalumnos que pasaron por la materia.
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