Page 111 - El Increible Hombre Menguante - Richard Matheson
P. 111
siempre había dicho—. ¿Vives por aquí? —
preguntó, tras eructar ruidosamente.
—En la próxima ciudad —dijo Scott.
—Como te iba diciendo, Vincent era mi amigo
—dijo el hombre con aire contrito—. Un amigo. En
el verdadero sentido de la palabra. Un amigo, un
aliado, un compañero, un camarada.
Scott lanzó una mirada a la estación de servicio
que acababan de dejar atrás. Parecía cerrada. Lo
mejor sería llegar a Freeport y asegurarse de que
podría conseguir la ayuda de alguien.
—Insistió —prosiguió el hombre— en revestir
la camisa de fuerza del matrimonio. —Se volvió—.
¿Tú comprends, querido niño? ¿Comprends, niño de
benditos huesos?
Scott tragó saliva.
—Sí, señor —repuso.
El hombre exhaló una bocanada de humo. Scott
tosió.
—Y lo que era un hombre —prosiguió el
individuo—, querido niño, se convirtió en una
criatura degradada, un lacayo, un siervo, un
autómata. Para decirlo en dos palabras… en un
alma perdida y marchita. —El hombre miró a Scott
con los ojos entornados—. ¿Sabes lo que quiero
decir, querido niño? ¿Lo sabes?
Scott miró por la ventanilla. Estoy cansado —
111

