Page 52 - El Increible Hombre Menguante - Richard Matheson
P. 52

madera,  manteniendo  el  equilibrio  al  cogerse  al


            borde inferior del tablero de la mesa.


                   La suela de sus sandalias era demasiado lisa. No


            se adhería bien a la madera. Tendría que quitárselas


            a pesar del frío que hacía. Lo hizo, sacudiendo un


            pie después del otro y, al cabo de un momento, oyó


            que chocaban contra el suelo.



                   Se tambaleó un momento, recobró el equilibrio,


            y aspiró larga y profundamente. Hizo una pausa.


                   Ahora.


                   Dio un salto hacia arriba en el vacío, y lanzó los


            brazos por encima del borde de la mesa. Un amplio


            panorama  de  enormes  objetos  amontonados  se


            ofreció a su vista. Entonces empezó a resbalar y se


            agarró  a  la  madera,  hundiendo  las  uñas  en  ella.


            Siguió  resbalando  hacia  el  borde,  mientras  su



            cuerpo avanzaba hacia el espacio y le arrastraba.


                   —No… —gimió con voz ahogada.


                   Consiguió saltar de nuevo hacia adelante, con


            las yemas de los dedos pegadas a la superficie de


            madera, y los brazos apretando desesperadamente


            hacia abajo.


                   Vio una vara curvada de metal.



                   Estaba a seis milímetros de sus dedos. Si no la


            alcanzaba,  se  caería.  Dejando  una  mano  quieta,


            clavándose  las  astillas  en  los  dedos,  alzó  la  otra


            mano hacia la vara.






                                                                                                            52
   47   48   49   50   51   52   53   54   55   56   57