Page 353 - La Penúltima Verdad - Philip K. Dick
P. 353

La penúltima verdad                           Philip K. Dick   353


           esté,  aunque  sea  a  dos  mil  kilómetros  de  distancia,

           Lantano  habrá  sabido  en  seguida  la  mala  noticia.  En


           cuanto  a  Foote...  en  estos  momentos  debe  de  estar con

           algo  muy  importante  entre  manos,  seguramente  en

           Ciudad  del  Cabo.  Si  es  tan  inteligente  como  supongo,


           espero que haya ido a Ciudad del Cabo, para decirle a

           Runcible la verdad sobre el proyecto especial. Y recuerde

           que en esos bloques de viviendas de Runcible hay miles


           y  miles  de  fugitivos.  Es  posible  que  los  haya  armado,

           instruido y preparado para...

              Se interrumpió.




              En la pantalla apareció la cara enorme, tridimensional y


           bronceada familiar a todos. El rudo y saludable rostro de

           Talbot Yancy.

              ‐Norteamericanos todos ‐dijo Yancy con su voz grave y


           firme algo campanuda pero agradable incluso simpática‐

           .  Con  humildad,  y  ante  Dios  tengo  que  haceros  un


           anuncio de tan suma importancia que sólo puedo dar las

           gracias  al  Todopoderoso  por  haberme  permitido  vivir

           junto a todos vosotros, hasta el día de hoy. Amigos míos...


              Ahogaba su voz la emoción, refrenada no obstante por

           el  férreo  estoicismo  de  aquel  hombre,  de  pura  fibra

           castrense.  Viril  siempre,  aunque  a  la  sazón  pareciese


           conmovido.  Así  se  mostraba  Talbot  Yancy  en  aquellos

           momentos, y Nicholas se vio incapaz de discernir lo que







                                                                                                             353
   348   349   350   351   352   353   354   355   356   357   358